El Concilio Internacional para la Educación Teológica Evangélica, (ICETE por sus siglas en inglés), se llevó a cabo el pasado 29 de Octubre al 2 de Noviembre, de 2018,  en Ciudad de Panamá, en donde el asunto teológico a tratar fue la “División Sagrado-Secular”.  El Vicerrector Académico de SENDAS, Dr. Marco A. Velasco Sosa y su esposa, la Profesora Myrza Enríquez, representaron a la institución.

En medio de la diversidad de tradiciones teológicas se presentó este tópico sobre la división ¨sagrado-secular¨ de la vida, que ha influenciado enormemente el pensamiento evangélico y afectado la fe cristiana, especialmente en Occidente llevándola a una crisis sobre nuestra pobre influencia cristiana en el mundo occidental.

El Dr. Velasco realizó el siguiente comentario sobre el tema:

Una antigua carta que data de los primeros siglos de la iglesia cristiana dice: 

Los cristianos en el mundo no se distinguen de los demás hombres, ni por el lugar en que viven, ni por su lenguaje, ni por su modo de vida. Ellos en efecto no tienen ciudades propias, ni utilizan un hablar insólito… Viven en ciudades griegas y bárbaras, según les cupo en suerte, siguen las costumbres de los habitantes del país, tanto en el vestir como en todo su estilo de vida y, sin embargo, dan muestras de un tenor de vida admirable y, a juicio de todos, increíble… Viven en la carne, pero no según la carne. Viven en la tierra, pero su ciudadanía está en los cielos…Aman a todos, y todos los persiguen…Para decirlo en otras palabras: los cristianos son en el mundo lo que el alma es en el cuerpo…Tan importante es el puesto que Dios les ha asignado, del que no les es lícito desertar (De la carta a Diogneto. Los Cristianos en el Mundo).

En el mismo tenor de esta antigua carta, sobre el testimonio cristiano público el llamado de ICETE es que, podemos decir que el Señor no sólo es Señor del domingo. Dios también es Señor del lunes y del martes, y de toda la semana incluidas nuestras actividades más ordinarias como el estudio, el trabajo o los quehaceres del hogar.

Respecto al secularismo, se puede decir que se trata de una mentalidad que hemos adquirido como parte de la cultura contemporánea. ¿Cómo podemos cambiar esta cultura con tal mentalidad? Primero concientizarnos de la existencia de la división sagrado-secular en la cultura que vivimos y que hemos tomado mucho de esa manera de pensar con la que tomamos muchas decisiones y basados en ello moldeamos nuestra vidas y nuestra misma fe cristiana. Segundo, debemos ¨no conformarnos a esta era ¨ secular, como dice El Apóstol Pablo. Él nos llama a ser transformados ¨por medio de la renovación de nuestro entendimiento¨ (Romanos 12:1-2). La división sagrado-secular es engañosa, nos hace miopes de la voluntad de Dios para nuestras vidas.

Es tiempo de vivir como los cristianos de los primeros tres siglos que transformaron su mundo sirviendo al Señor, sin la división sagrado-secular, como testifica la ¨Carta a Diogneto¨:

¨Viven en la carne, pero no según la carne. Viven en la tierra, pero su ciudadanía está en los cielos…¨.