Abraham Fernández Gámez, de 38 años, es Médico pediatra en un hospital de gobierno de Tecate Baja California, México. Él y su esposa Rebeca tienen dos bellos hijos con edades de cuatro años y siete meses. Actualmente asisten a la Iglesia del Nazareno en Tecate.
Su Padre fue Pastor laico y de él recibió el ejemplo de servir a Dios en todas las áreas posibles. Ha sido miembro activo de la iglesia por muchos años y ha servido en el área de Escuela Dominical y como predicador en los servicios regulares. Desde siempre, sintió la necesidad de prepararse mejor para servir a Dios; sin embargo, por su trabajo y diferentes responsabilidades de padre de familia se le hacía imposible matricularse de lleno en un seminario, pero su deseo de estudiar continuaba latente en su corazón.
Fue entonces que en una reunión conoció el Dr. Rubén Fernández (Rector del Seminario Nazareno de las Américas), y lo escuchó hablar acerca del Seminario Nazareno Virtual (SNV). El sentía que era exactamente lo que el necesitaba y que estaba al alcance de sus posibilidades. En cuanto terminó la reunión, le pidió a Don Rubén que lo inscribiera. El se llevó a cabo el proceso y al día de hoy solo le faltan siete materias para terminar.
Abraham dice, “Mi experiencia ha sido fabulosa, y mis expectativas fueron superadas ampliamente al constatar la calidad de cada uno de los cursos y la excelencia con la que cada uno de los profesores se manifiesta al enseñarnos.”
Como alumno presencial de la escuela de medicina estuvo acostumbrado a mucha presión por parte de los profesores, pensó en cierto momento que estudiar de manera virtual sería algo mucho más fácil, pero no fue del todo así. Abraham explica así: “Creo que el grado de dificultad que presenta un curso virtual de SNV, es suficiente para que uno mantenga el compromiso y a la vez no tanto como para hacerme sentir agobiado.”
También le sorprendió y ha disfrutado la gran variedad recursos que son posibles a través de la plataforma virtual, ya que tiene acceso a videos, lectura de libros, video conferencias en vivo, asesoría personal y estrecha de los profesores, opiniones y réplicas de los compañeros (alumnos de distintos países) a sus comentarios.
Abraham resume la experiencia con estos comentarios: “Cuando pienso en SNV se me viene a la mente una palabra que me llena de orgullo: ‘Excelencia.’ Esta muy agradecido con Dios porque tiene a la mano este recurso tan eficiente para prepararse y servir eficazmente a nuestro Señor. ¡Qué bueno que un día alguien lo pensó, que a alguien se le ocurrió!, ya que por su fe y valentía hoy muchos podemos disfrutar de esta preciosa preparación para los hijos (as) de Dios”.
Si usted tiene interes en estudiar teologia pero pensaba que nunca sería posible, matricularse en un curso de Seminario Nazareno Virtual. www.nazarenovirtual.com